jueves, 31 de enero de 2008

¡¡¡Atrapados en Punta Arenas¡¡¡






Hola soy Edu.
Despues de tres dias atrapados en punta arenas,por problemas de comunicacion de todo tipo de medios,tierra,mar y aire ya que ninguno coincidia con lo que teniamos previsto .Al final pudimos tomar un autobus que nos llevo a rio grande donde nos encontramos ahora,el dia antes nos fuimos de visita a una pinguinera en barco ,en la isla magdalena,donde existen unas 62000 parejas,una visita rapida a la isla de aprox una hora,y despues vuelta al barco,avistamos, delfines, aves de todo tipo.Al dia siguiente intentamos hacer una excursion a un parque nacional pero el viento que sopla hace imposible recorrer km,por lo cual desistimos del intento,es un handicap muy importante ya que es un viento racheado que lo tenemos en contra casi todo el camino,mañana pretendemos llegar hasta tolhuin y proximante ya ushuaia,donde finalizaremos nuestro viaje,con gran pesar,ya que no apetece demasiado volver a la city madrileña,pero bueno obligaciones mandan,por aqui hay muchas cosas por visitar y andamos escasos de tiempo.Se intentara colgar fotos pero internet anda un poco mal y tenemos problemas para subir fotos

corto y cambio desde rio grande

miércoles, 30 de enero de 2008

De Puerto Natales a Punta Arenas



La verdad es que nos costó salir de Puerto Natales., primero porque estábamos muy cansados por el trekking brutal "del día de descanso", y segundo porque es una ciudad muy agradable.

Teníamos planeado hacer 150 km el primer día y 100 km el segundo, pero nos enredamos mucho por la mañana y al final salimos como a las 5 de la tarde de Puerto Natales.
Al poco de salir del pueblo nos cruzamos con dos cicloturistas que resulta que eran de Lavapies y que conocemos gente en común. Esta gente si que se lo monta bien, ya que no volvían hasta junio a Madrid. Tienen una tienda en Lavapies de productos ecológicos llamada A saltO DE mATA.
Después de reírnos un buen rato por la casualidad de encontrarnos a alguien de Madrid en esa carretera en el culo del mundo, seguimos nuestro camino. El aire que tendría que soplar a favor ese día estaba de vacaciones. Todos los arboles estaban doblados como banderas por el viento, pero no soplo esa tarde. Al final llegamos a Morro Chico después de 100 km. Ante la gran oferta de alojamientos decidimos dormir en una cobertizo de madera que nos indico un poli. Nos hicimos una fogata para calentarnos y alumbrarnos mientras cocíamos el kilo de pasta con chorizo que supo a gloria.
A la mañana siguiente si que soplaba el aire como es costumbre en la zona, lo malo es que nos soplaba de costado. Por delante nos quedaban 150 km de asfalto hasta Punta Arenas. Al final llegamos a las 12 de la noche después de 8 horas de pedaleo. Nos comimos unas hamburguesas de churrasco (2 por cabeza), y a la piltra.

sábado, 26 de enero de 2008

Torres del Paine








Salimos de Rupai-Pacha dirección Pto natales,después de 15 km de ripio,llegamos al puesto fronterizo de Cancha Carrera en la parte argentina ,donde sellamos nuestros pasaportes,de allí nos trasladamos por mas ripio,hasta llegar a Cerro Castillo ya en la parte chilena,nos surtimos de todo tipo de alimentos,de allí salimos dirección a Pto Natales a unos 62 km,con un calor sofocante,nos dirigimos lentamente en un continuo sube y baja,hasta que en una cuesta tuvimos un pequeño pinchazo de Conrado,menos mal que nos pillo a la sombra jejeje,ya que por estos lares no hay una puñetera sombra,como ya imaginareis,nos estamos tostando al sol,una vez subsanado el pinchazo continuamos,una vez terminado el ripio,empezó una carretera bien pavimentada,que agradecimos bastante,ya que nuestro trasero ya esta sufriendo bastante jejeje,una vez que llegamos a Pto Natales buscamos un hostel,donde nos encontramos ahora.




Al día siguiente para relajar las piernas,nos hicimos un trekking por las torres del Paine,unas 6 horas de caminata jejeje,por parajes incomparables,donde se mezclaban valles,ríos de agua cristalina y montañas majestuosas,todo en uno,después de unas ascensión por un terreno de piedras,donde tenias que ir a gatas practica mente,llegamos a la cumbre,ante nosotros se encontraba unas rocas enorme en forma de chimenea,y en la parte de abajo un lago,la sensacion era maravillosa,nos comimos un bocadillo de churrasco.Al contemplar dicho monumento daba una sensacion de plenitud,que poca veces puedes sentir ,ante aquella mole de piedra.Una vez hechas las fotos de rigor,descendimos hacia abajo,con mucha precaución,ya que no llevamos botas de trekking,y el terreno resbalaba bastante,que la hacia muy peligrosa,una vez que descendimos,cogimos una autobús de vuelta hacia Pto natales,en una furgoneta que volaba sobre el ripio.




corto y cambio desde Pto natales




pd:un saludo a todos los compañeros de la sala Cou,familiares y demás ,se despide Edu,nos vemos

Salida del Calafate










Al final no pudimos con los 150 km porque el aire en contra fue infernal desde el kilómetro 100. Hicimos 120 km hasta una estación de policía en medio de la estepa. Allí plantamos las tiendas de campaña junto a la estación para resguardarnos del viento. Los policías nos dijeron que no había problema y nos dieron agua, que resulta que sacaban del río. Nos hicimos dos perolones de arroz con hongos para 12 personas, jeje.



Al día siguiente mas de lo mismo: ripio y mas ripio, viento y mas viento. Esta etapa si que fue enteramente contra el viento, 85 km en 7 horas de pedaleo y unas 11 horas desde que salimos por la mañana. Conseguimos llegar a un rancho de agroturismo llamado Rupai-Pacha. Aunque nos costo ya que Abel y Jero creyendo ver unas casas a lo lejos y empezaron a correr ansiosos de llegar, pero resulto ser una alucinación, ya que las casas eran unas colinas con forma de tejado, y se habían pasado la entrada al rancho. Total que tuvimos que dar la vuelta y hacer otros 6 km más.



La señora que regenta el rancho fue muy amable y nos dio una cena memorable, a base de carne con papas y lomo de guanaco. Me levanté por la noche al servicio y flipé con el cielo, por un lado estaba la luna llena y por el otro lado se veía el resplandor naranja del amanecer.



Bueno, ahora os cuenta Edu las siguientes etapas. Besotes




martes, 22 de enero de 2008

Los cuatro jiñetes del apocalipsis






Bueno queridos lectores...
Ya estamos los cuatro con todo el equipo preparado. Ahora mismo partiremos desde El Calafate hacia Tapi Aike, a 150 km de aqui. Esperemos que Eolo nos ayude.
Ayer estuvimos viendo el glaciar Perito Moreno. Es espectacular, una mola de Hielo de 60 metros de alto por 5 km de frente. El hielo produce unos sonidos brutales al resquebrajarse debido al deshielo, y caen enormes trozos al agua. Luego nos fuimos de "Parrillas" a un restaurante BUFFET LIBRE DE CARNAZAAAAA!!!! Podeis imaginar como nos pusimos, jeje.
Ayer nos encontramos en la calle principal con un individuo que se quedo mirando nuestras bicis. Resulta que le conociamos por el blogg que tiene. Es un español que esta viajando en bici por sudamerica. Estuvimos charlando un buen rato y nos conto como va a ser la ruta hasta Ushuaia. Parece ser que no hay mucho ripio, y es por ello (oye) que Abel se apunta a hacer lo que queda de ruta.
Bueno, me despido diciendo que estamos todos bien y muy cebaditos. Ya os contaremos si llegamos a Tapi Aike. Besotes

domingo, 20 de enero de 2008

Dejamos El Chaltén, PARAISO TERRENAL




Este sitio nos ha dejado alucinados. Está lleno de glaciares, valles de postal, picos nevados, aves de todo tipo como cóndores. Bueno, os podéis imaginar como nos lo hemos pasado.

Antes de ayer hicimos una ruta en bici hacia un lago, el Lago del Desierto. En el trayecto vas junto a un río que avanza por valles glaciares. Luego atravesamos un bosque super viejo de nothofagus, y finalmente llegas al lago desde donde se contemplan un par de glaciares que rugen con estruendo por las pequeñas avalanchas que produce el deshielo.
En total fueron unos 80 km, que saboreamos en cada pedalada.


Ayer hicimos una ruta de trekking hacia el pico más famosa de este parque, el Fitz Roy. Estuvimos todo el día en la montaña, andando por senderos entre lagos, bosques y unas impresionantes vistas. Fue la guinda del pastel. Nos sentamos a comer delante de un par de glaciares justo al pie del Fitz Roy, momento mágico.

Bueno, que perdemos el autobús a Calafate!

Muchos besos y en el próximo capítulo habrá dos personajes más.

jueves, 17 de enero de 2008








Desde El Chaltén, cuna del Trekking






Ahora estamos en El Chaltén, un pueblecillo de dedicación exclusiva al trekking. Imaginad un pueblo en el que todos los habitantes llevaran mochila y botas de montaña, pues eso es el Chaltén. Aquí las montañas son impresionantes, con formas alucinantes y rodeadas de glaciares y lagos. Ayer llegamos desde Los Antiguos en bus a las 5 de la madrugada después de 15 horas de viaje por ripio. Fue imposible dormir por la noche, pero durante la tarde en el autobús vimos la estepa patagónica, que es como un desierto enorme donde la vista se pierde en el horizonte. La vegetación allí está compuesta por pequeños setos que soportan las pocas precipitaciones y el fortísimo aire patagónico. Pudimos ver ñandús?, que son como avestruces y guanacos, que son como llamas de estepa, y otros muchos animalillos de la estepa.
Según llegamos a El Chaltén a las 5 de la madrugada nos pusimos a buscar donde dormir la noche siguiente. Tras dar muchas vueltas, ya que estaba todo ocupado encontramos una pensioncilla de mala muerte pero cómoda. Sin dormir decidimos hacer una ruta de trekking hacia la laguna de la Torre. El camino entre bosques y cortados nos llevó hasta un glaciar y una laguna. El sitio es increíble, ya os pondré alguna foto para que flipeis. Estuvimos andando unas 8 horas, pero mereció la pena. Hoy nos lo tomamos con más calma para ver pájaros y plantitas. Mañana realizaremos otra ruta que dura unas 12 horas, ya os contaré como acabamos.
Besotes.

sábado, 12 de enero de 2008

Atrapados en Coyhaique

Este pueblo nos atrapa inexorablemente, y no por nuestra propia voluntad. Todo lo que hemos intentado hacer aquí no ha sido posible. Intentamos informarnos de cómo ir a dos reservas naturales que hay cerca de aquí, pero era practicamente imposible en una de ellas y la otra que es más accesible no dispone de red de senderos para andar por la reserva, asinquen no pue ser. Decidimos irnos, pro la empresa de transportes que nos trajo hasta aquí parece haber desaparecido de la faz de la tierra, lo cual no nos extraña puesto que cuando nos bajamos del autobús al llegar aquí, un par de coches de policía secreta le pidieron los papeles al chofer y nos interrogaron, porque resulta que es ilegal esa empresa.
Después de dar mil vueltas por el pueblo intentando conseguir transporte para salir de aquí, hemos encontrado un autobús que mañana nos llevará a Puerto Ibañez, donde cogeremos una bar quita para cruzar el lago General Carrera hasta Chile Chico, y desde allí pasar a tierras argentinas.
Nos estamos poniendo ciegos a carnaza.
Bueno, besitos pa toooos

viernes, 11 de enero de 2008

Fotiglios

Esta conexión es una mierda, ya subiré fotos en otro momento. Besos

Pata-agonía










Hola, perdonad la tardanza, pero no ha sido fácil encontrar un ciber por estos pueblos de la Patagonia chilena.
Tras un larguísimo viaje en avión con escala en Bueno Aires por fin llegamos a Bariloche. Un bonito pueblo junto a un lago precioso. El día siguiente lo pasamos haciendo compras para equiparnos para el viaje en bici. (dato: facturar las piquetas de la tienda porque si no os las quitarán en el control policial para acceder al avión, y es muy complicado encontrar piquetas en Bariloche)
Al día siguiente fuimos en autobús hasta Esquel, para desde allí comenzar a pedalear hasta Calafate. Allí nos encontramos con un tipo muy amable montado en una Giant con todo xtr y ruedas de bastones de carbono, que nos contó un poco de la ruta que íbamos a hacer, y a Abel (que estaba vomitando en el baño) le dio su teléfono por si se encontraba mal por el camino. Hicimos 30 km hasta Trevelín con aire en contra por una carretera asfaltada con mucho tráfico, y calorcito...y los 60 kilos de equipaje y bici.
Desde Trevelín al día siguiente nos acercamos al Parque Nacional de los Alerces. No era mucha distancia, 42 km, pero según los lugareños hacía un calor nada usual por allí, 40 grados por lo menos. Además era viernes y todos los domingueros subían al parque en sus 4x4 a toda pastilla por el ripio infernal, para hacer sus carnazas a la brasa. Yo me bebí 6 litros de agua, mientras Abel apenas dio dos sorbos, jeje. Llegamos al camping junto al lago medio desencajados y deshidratados, en el que quedaba una sola plaza que ocupamos sin rechistar, junto a una familia que escuchaba música local apestosa y hacían sus carnazas a la brasa (asados según ellos). Todo nuestros músculos volvieron a sus sitios tras una litrona fresquita, una ducha y unos macarrones caseros hechos por nosotros.
Al día siguiente queríamos adentrarnos más en el parque para ver un bosque de alerces milenarios, pero estaban todas las plazas del barco que había que coger ocupadas hasta dos dias después. Asinquen volvimos a Trevelín desandando el camino andado, pero esta vez con fresquito, con viento a favor y cuesta abajo, un lujazo. En Trevelín nos encontramos con un Belga que iba en bici con alforjas, el solo. Venía del sur y se dirigía a Santiago de Chile. Desde Trevelín seguimos ruta hacia Chile. Unos paisajes increíbles, rodeados de montañas con formas curiosas y bosques de Nothofagus. Al cabo de unos 85 km desde el inicio de etapa, llegamos al control fronterizo. Allí nos dijeron que fuéramos rápido hacia el control chileno que estaba a 400 m ya que cerraban las barreras a las 20:00, y quedaban 4 minutos. En el control chileno Abel declaró que llevaba un chorizo revilla picante, que tuvo que sacar del bobtrail para que lo viera el funcionario. Mientras tanto otro funcionario me preguntaba si le podía arreglar un pinchazo que tenia en una rueda de su bici (que morro, ya que todavía nos quedaban unos cuantos kilómetros hasta el pueblo más cercano) así que me puse a arreglarle el puñetero pinchazo. Tras otros 15 km llegamos a Futaleufú, un pueblecillo que es la base del rafting mundialmente conocido. Allí acampamos en un camping junto al río. Nos invitaron a cenar cordero con arroz los encargados del camping. Allí había unos chavales judíos y dos americanas, que llevaban 5 meses dando vueltas por sudamérica, que habían venido a hacer rafting por el río futaleufu.
Al día siguiente Abel durmió 24 horas seguidas, con pequeños intervalos de defecación diarreika. Mientras yo comí descontroladamente durante 24 horas, y me hice una rutilla en bici por la orilla del río.
Al día siguiente partimos hacia Santa Lucía, aldea de dos calles, de gente muy amable. 80 km por ripio infernal, pero unas vistas brutales. Ese día empezó a llover y no paró en dos días más. Cuando llegamos a Santa Lucía Abel con los ojos inyectados en sangre, juró que jamás daría una pedalada más. Y ahí quedaron las bicis olvidadas hasta Calafate. Estuvimos un día más en Santa Lucía. Durante el cual no paró de llover, incluso heló por la noche.
Al día siguiente "cogimos" un autobús hasta Coyhaique, donde nos encontramos en este momento. En el trayecto, que era el mismo que íbamos a realizar en bici, alucinamos con los paisajes de ensueño del Parque Nacional de Queulat.